El grafeno es un material que marcará el futuro en microelectrónica de los próximos años. Al grafeno lo podríamos encontrar tanto como en transistores, baterías y memorias. También puede desalinizar agua, o formar parte de armaduras livianas y resistentes. Ahora, han descubierto que también puede repararse a sí mismo
Un equipo de la Universidad de Manchester, liderado por Konstantin Novoselov (Premio Nobel de Física 2010 junto a Andréy Gueim), ha descubierto que después de hacer un pequeño agujero en una lámina de grafeno, solo fue necesario agregar carbono para que este material pueda “tejer” en el agujero y repararse.
El equipo de la Universidad de Mánchester trabajaba en una investigación relativa a la interacción del grafeno con otros metales y evaluar su uso en electrónica. Durante la investigación, se halló evidencias de que los metales provocaban la formación de agujeros en la estructura del grafeno, importante hallazgo puesto que mostraba que el material se debilitaba y podría llevar consigo pérdidas en las propiedades del grafeno. Sorprendentemente, mientras analizaban estos agujeros formados, observaron también que el material se reparaba de manera espontánea usando átomos cercanos y reconstruir nuevamente su estructura inicial.
La investigación se centró en disparar un rayo de electrones sobre una lámina de grafeno, provocando un pequeño agujero en ella. Al agregar átomos de paladio y níquel, lograron estabilizar el tamaño del agujero. Sin embargo, cuando agregaron átomos de carbono al mismo agujero, el paladio y el níquel fueron desplazados, provocando que el grafeno comenzara a reparar el agujero hasta cerrarlo por completo.
Esta propiedad del grafeno abre la puerta a que este material pueda ser utilizado en cada vez en más ámbitos, además del campo de la microelectrónica. El director científico del SuperSTEM, el Doctor Quentin Ramasse se mostró muy contento con el trabajo desarrollado:
“El componente milagroso”, “el material de Dios” son unos de los nombres que le están poniendo ya a este material. Como ha sucedido con otros tantos materiales, el grafeno todavía debe superar las barreras de la producción en masa y el bajo costo.
La historia nos muestra que otros materiales han estado en una situación similar (a modo de ejemplo, el aluminio llegó a ser más caro que el oro antes del descubrimiento del proceso Hall–Héroult), pero ya se están explorando métodos que podrían disparar la producción de grafeno en el corto plazo.
Se le conocen propiedades extraordinarias, aunque recientemente se ha descubierto otra virtud más en el grafeno: Puede repararse a sí mismo, sin estimulación alguna.
Sin duda, si logra saltarse el problema de la producción en volumen, el grafeno es uno de los materiales del futuro que aprovechara sobre todo la nanotecnología.
Más información al respecto en:
arXiv (Inglés)
Nano Letters. (Inglés)
http://phys.org/news/2012-07-superstem-reveals-graphene-re-knits-holes.html (Inglés)
http://www.abc.es/20120712/ciencia/abci-descubren-grafeno-puede-repararse-201207121128.html (Español)